Durante la etapa de pre-impresión de catálogos, en el diseño, se deben fijar las marcas de registro y el rebase. Las marcas de registro permiten indicar por dónde debe realizarse el corte. Para evitar que se pierda una parte de las imágenes del catálogo cuando se corta el papel, es importante establecer el rebase, es decir, expandir las imágenes unos centímetros. Hay que considerar también el tipo de papel que se utilizará, para prever cómo se verán las imágenes al momento de la impresión del catálogo.
Además hay que tener en cuenta el tipo de encuadernación que se empleará, ya que de este modo se puede calcular el grado de apertura del catálogo y, por ende, la medida del margen interno y el espacio de impresión. Saber qué tipo de encuadernación se va a utilizar también permite definir el diseño de la portada y contra portada.
En cuanto a la impresión de catálogos, en sí misma, existen diferentes sistemas adecuados para ello. El método más utilizado es el impresión offset, ya que presenta muchos beneficios. Entre ellos pueden contarse: la opción de imprimir en cualquier tipo de papel, a todo color (cuatro colores -cyan, magenta, amarillo y negro- con cuya combinación se logran muchísimos otros) y la posibilidad de realizar tiradas de diferentes dimensiones. Además de los cuatro colores tradicionales también se puede hacer la impresión de catálogos, impresión de revistas, e impresión de folletos en colores Pantone, es decir, preparados con fórmulas exactas y que ofrecen plateados, dorados y fluorescentes.
Por otra parte, existen dos métodos de impresión según la forma del papel empleado. Por un lado, hay imprentas que utilizan rollos de papel mientras otras emplean pliegos. Las imprentas que utilizan rollos de papel imprimen más rápido y muchas veces pueden hacerlo de ambos lados a la vez. A su vez, existen dos tipos de imprentas para bobinas de papel: con secado o sin secado de tinta. Las primeras tienen un sistema de secado de la tinta a medida que sale el papel, lo cual permite imprimir a gran velocidad, aún si éste es ilustración brillante. Este tipo de imprenta ofrece un buen nivel de reproducción fotográfica. Los trabajos realizados en estas imprentas suponen el trabajo de muchos operarios, por lo cual los precios son altos. Es sólo conveniente recurrir a estas imprentas si se quiere realizar una gran cantidad de impresión de catálogos, aunque se utilizan especialmente para impresión de diarios e impresión de revistas.
Existen también imprentas que trabajan con rollos de papel, pero que no tienen un dispositivo de secado de la tinta, de modo que ésta debe secarse con el aire natural. Sólo pueden imprimir sobre papeles sin acabado y no presentan buena calidad de reproducción fotográfica. Este tipo de imprentas es ideal para imprimir pequeñas cantidades, ya que los costos son bajos.
Las imprentas que utilizan pliegos tienen un método preciso de impresión, es decir, una reproducción de alta definición. Se utilizan para imprimir pequeñas tiradas y se emplean en todo tipo de papel y gramaje. Por su alta calidad (superior a los otros dos métodos de impresión) y la velocidad lenta de funcionamiento, es la forma más cara de imprimir. Este tipo de imprentas generalmente se utiliza para trabajos pequeños o de excelente nivel (tarjetas personales, dípticos, trípticos y catálogos).
Por otra parte, al prever el proceso de impresión es necesario tener en cuenta el tipo de formato que tendrá el catálogo, ya que las piezas con tamaños particulares o cortes especiales suponen mayores costos e imprentas especializadas.
Es por eso que en, Surtigraf, la imprenta en el DF, contamos con todo tipo de impresión de catálogos, impresión de revistas, e impresión de folletos a un bajo costo y con la más alta calidad.